Departamento de Derecho Penal y Criminología

Actualidad
22 de enero de 2025

Reflexiones sobre la escritura jurídica clara (Parte II)

La redacción jurídica en tiempos de IA: desafíos, responsabilidad y una necesaria capacitación integral.

Por: Carlos Vicente Pérez Giraldo, Docente Investigador

Al considerar el apoyo tecnológico para la redacción de textos jurídicos y judiciales, es fundamental recordar que la inteligencia artificial (IA) no es una solución mágica. Su uso en campos profesionales requiere responsabilidad y conocimientos avanzados sobre cómo manejarla. Un ejemplo de ello es el legal prompting, técnica que los profesionales del derecho deben utilizar para interactuar eficaz y responsablemente con modelos de IA generativa, como ChatGPT, con el fin de obtener respuestas precisas y útiles en contextos jurídicos (Yu, Quartey, & Schilder, 2022).

Además, recientes estudios indican que es indispensable un enfoque híbrido que combine el uso de software bajo control y supervisión humana. Este enfoque asegura que el trabajo del operador no se limite a introducir instrucciones, sino también a supervisar los resultados y corregir errores tanto de forma (redacción, ortografía, etc.) como de contenido. Al respecto, es pertinente mencionar el artículo de Tie et al. (2024) publicado en arXiv: “LLMs are Imperfect, Then What? An Empirical Study on LLM Failures in Software Engineering”. Este estudio observacional, con 22 participantes utilizando ChatGPT para tareas complejas de ingeniería de software, ofrece valiosas lecciones sobre cómo optimizar la colaboración entre humanos e IA para mejorar la eficiencia y los resultados de las tareas. Así mismo, para efectos prácticos, son útiles las recomendaciones de Mollick (2024) en su obra Co-Intelligence: Living and Working with IA.

En síntesis, la IA por sí sola no es suficiente. Su implementación debe ir acompañada de una capacitación integral que incluya legal prompting, técnicas de redacción, conocimientos jurídicos especializados y competencias en búsquedas en bases de datos. Igualmente importante es garantizar que los resultados obtenidos puedan verificarse mediante los protocolos autorizados por el ordenamiento jurídico.

Ello refuerza la necesidad de capacitación y profesionalización de los abogados y funcionarios judiciales. Una formación básica pero sólida en los principios de la gramática (o incluso de la lingüística) es esencial para expresarse correctamente. Esto debe complementarse con técnicas de escritura específicas para el campo jurídico. En este sentido, el profesor Carlos Guzmán replicó el anterior post en X, donde, entre las interacciones, se destacó como opinión unánime el rechazo al lenguaje oscuro y complejo en el derecho, especialmente en el ámbito del procedimiento penal oral. Así, se criticó el uso de formas arcaicas como empero y neologismos desafortunados y desaconsejables como aperturar (RAE y ASALE, 2025).

No obstante, la claridad en la redacción no se limita al uso de palabras adecuadas. Este concepto también abarca la estructuración de títulos, párrafos y páginas completas, en las que los y las abogadas buscan plasmar su razonamiento de la manera más robusta posible. Por tanto, es crucial encontrar un equilibrio entre tres aspectos:

  1. Claridad: Utilizar un lenguaje comprensible para todos los lectores, especialmente teniendo en cuenta que los escritos pueden ser leídos no solo por juristas y expertos, sino también por sujetos procesales que no sean abogados —aun cuando cuenten con uno— o por usuarios del sistema judicial.
  • Precisión: Emplear términos ajustados a la dogmática y las instituciones jurídicas.
  • Integridad: Incluir toda la información relevante, los problemas y los argumentos necesarios para resolver el caso.

Finalmente, lo más desafiante pero crucial es aplicar una especie de “navaja de Ockham” en la redacción. Esto implica enfocarse exclusivamente en lo esencial del caso y evitar cualquier elemento superfluo, manteniendo así una comunicación clara, precisa y eficaz. Este es un campo en el que el nuevo plan de estudios de la Facultad de Derecho del Externado, con asignaturas enfocadas en la redacción y la expresión jurídica, tendrá mucho por explorar y aportar al país. X: @vicenteperezg