Departamento de Derecho Penal y Criminología

Actualidad
1 de noviembre de 2023

Galán y la seguridad

La complejidad de la capital requiere del nuevo alcalde medidas innovadoras contra lo que aqueja a los bogotanos

Por: Luis Alberto Páez, docente investigador

La victoria en primera vuelta del alcalde electo de Bogotá sorprendió a muchos. Su contrincante, Juan Daniel Oviedo, había desincentivado voto útil al asegurar -con su experticia estadística- que volverían a haber comicios el 19 de noviembre[1]. La realidad fue aplastante: más del 49% de los votantes apostaron por Carlos Fernando Galán para asumir el llamado segundo cargo más importante de elección popular.

Galán se enfrenta a su mayor desafío: asumir el liderazgo de una ciudad de casi 8 millones de habitantes y combatir preocupantes cifras como los aumentos significativos del hurto a personas y vehículos en el presente año[2], al igual que la innegable percepción generalizada de inseguridad que la convirtió en el eje central de discusión a lo largo de esta campaña. 

Aspectos del plan de gobierno del alcalde electo comportan así particular atención. En lo que dicho programa denomina “Fortalecimiento de la investigación criminal y judicialización[3], Galán propone un enfoque de atacar la capacidad económica del crimen organizado. Considero este enfoque un acierto, ya que la incidencia del delito de hurto (en particular de celulares o de autopartes) se vincula inexorablemente con el provecho ilícito que ello aporta en negocios prestos a la receptación.

Adicionalmente, Galán acierta en establecer que las políticas de seguridad en Bogotá que se han basado en perseguir al que denomina “el eslabón más débil de la cadena delincuencial[4] son cuando menos inefectivas. Quisiera pensar que con esto, el alcalde electo pretende alejarse de las recurrentes opiniones emitidas por la actual administración distrital, dirigidas a justificar el crecimiento de la delincuencia en las decisiones de jueces de garantías que, amparándose en la excepcionalidad que nuestro ordenamiento jurídico adscribe a la imposición de medidas de aseguramiento, optan por garantizar el derecho a la libertad y preservar la presunción de inocencia de personas que pueden constituir dicho eslabón antes referido.

Guardando las proporciones con los argumentos más pragmáticos que se han expuesto en favor de legalizar ciertas drogas como instrumento para combatir el narcotráfico, atacar las cadenas de producción que se nutren del hurto de celulares o autopartes debe ser la prioridad de la administración entrante, pues con dicha lucha sí se podrán observar los resultados que la incesante judicialización de atracadores no ofrece por sí sola. 

El programa de gobierno del alcalde electo también se compromete a promover al Distrito como “el primer respondiente[5] que velará por brindar apoyo directo a las víctimas de delitos, orientándolas hacia denunciar lo ocurrido. Incontables son las ocasiones en que conocidos que resultan víctimas de la inseguridad en Bogotá nos describen cómo distintas autoridades -en muchos casos, lamentablemente, nuestra Policía- obstaculizan aquello que confusamente se incentiva por parte del Estado: el denunciar. Funcionarios indican no ser los competentes para recibir denuncias o, en caso de sí poderlas recibir, sólo recibirlas hasta determinada hora. 

Galán debe conocer lo vital que resulta para la Fiscalía que las personas denuncien aquello que atenta seriamente contra los derechos de otros. Pero cuando el hurto en distintas modalidades aqueja a la ciudadanía al nivel que queja a los bogotanos, el apoyo directo a las víctimas de esos delitos no debe únicamente circunscribirse a la comisión de delitos más graves, sino que también se requiere dicho apoyo si de verdad se quiere luchar contra esa delincuencia común que observamos en redes sociales cada noche.

Más allá de las ideologías, el restablecimiento de la seguridad en nuestra ciudad amerita un alcalde que esté a la altura del desafío, por lo que la coordinación entre autoridades que la administración entrante logre concretar y la atención a las problemáticas referidas en esta columna -entre otras más- será fundamental para observar resultados en el corto y mediano plazo. 


[1] Calderón, D., Lewin, J.E. (26 de octubre de 2023). Juan Daniel Oviedo: “Las cifras no mienten, habrá segunda vuelta”. El País. Consultado en línea: https://elpais.com/america-colombia/2023-10-27/juan-daniel-oviedo-las-cifras-no-mienten-habra-segunda-vuelta.html

[2] Secretaría de Seguridad Distrital (30 de septiembre de 2023). Análisis general de delitos. Consultado en línea: https://analitica.scj.gov.co/analytics/saw.dll?Portal

[3] Programa de Gobierno del alcalde electo. P. 10.

[4] Ibid., P. 8.

[5] Ibid., P. 11.